Las causas de la autovaloración
deficiente han sido ya fundamentalmente detectadas. Si el proyecto de vida en
la familia es contradictorio o inexistente, o si el ambiente que se vive es
defectuoso, reiteradamente agresivo, pobre de estímulos o sórdido, sucio, etc.,
entonces se cultivará el subdesarrollo, la incompetencia del medio y los
autodestructivos sentimientos de culpa.
La autovaloración defectuosa aparece
agravada cuando existe irracionalidad en premios y castigos, tales como regañar
o maltratar por hechos que en otras ocasiones fueron completamente indiferentes,
o aún provocaron diversión o risa. Ante esta incongruencia de manifestaciones,
el adolescente muy difícilmente puede construir una imagen de lo correcto y lo
incorrecto y su comportamiento estará inclinado a lo caótico o lo fatalista.
Dado que cualquier conducta puede
ser castigada, se desarrolla un sentimiento permanente de culpabilidad y azoro.
El resultado será la baja autoestima y las escasas posibilidades de que afloren
las mejores capacidades de muchachas y de muchachos, por lo que sus
perspectivas de vida estarán teñidas de frustración e insatisfacción confusa.
Hospital Médica Sur:
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