lunes, 30 de septiembre de 2013

La Desnutrición en los jóvenes adolescentes

            Robles (2007) refiere que cuando la ingesta alimentaria es deficitaria, su resultado necesario es la desnutrición. Lo primero que se ve afectado por la desnutrición es el crecimiento. De aquí que tantos niños como los adolescentes y los adultos desnutridos tengan pequeña estatura, En México, la desnutrición se ha agravado, según el Instituto Nacional de la Nutriología, especialmente en el medio rural en donde el 45% de los niños presentan retraso leve en el crecimiento, entre 10% y 15% retraso medio, y el 5% retraso grave. En las ciudades se presenta aproximadamente la mitad de estos porcentajes, lo cual es también preocupante.

            La desnutrición puede afectar a los niños desde antes del nacimiento debido a la desnutrición de la madre. De aquí que en las épocas críticas nazcan cada vez más niños con peso por debajo de los 2.5 KG. El nacer desnutrido representa una desventaja grave para la persona tanto en las posibilidades de sobrevivencia como en las oportunidades de estudio y trabajo. La desnutrición se encuentra como la causa de fondo en el aumento de la mortalidad de los niños entre el nacimiento y los tres años. El niño, y también el adolescente desnutrido, es menos activo que los otros, lo que retrasa su desarrollo intelectual y emocional; duerme más tiempo del que dormiría con alimentación normal y es más propenso a la adquisición de enfermedades, las cuales contribuyen adicionalmente a agravar el estado de desnutrición. Es frecuente la desnutrición por ingestión mal balanceada de alimentos, generalmente exceso de dulces, harinas y grasas y carencias minerales, vitaminas, fibras y proteínas,


            Se ha encontrado que especialmente las adolescentes pueden ser víctimas de anemia debido a que llevan una vida muy activa, su dieta es desbalanceada, crecen muy rápido y comienzan a menstruar. Esto determina un déficit de hierro que empobrece los eritrocitos y dificulta por ello el transporte de oxígeno a las células.; todo esto conduce a desgano y fatiga rápida. Obviamente el remedio no está en regañarla, como desgraciadamente ocurre con algunos padres, sino en atender su salud.


viernes, 27 de septiembre de 2013

Educación alimentaria en los adolescentes

            Uno de los primeros puntos de  la educación alimentaria que el adolescente debe saber es aprender que lo que comemos se debe corresponder con lo que nos desgastamos en el trabajo y en el ejercicio. Si comemos menos de lo que necesitamos, llegaremos a la desnutrición; si comemos más llegamos a la gordura. En este último caso los nutriólogos han puesto de relieve algunas verdades importantes, como por ejemplo, que son tres los alimentos que se transforman en obesidad cuando son ingeridos en exceso: las grasas, las harinas y los azúcares.

            La recomendación profiláctica general para los adolescentes es la de evitar frituras, las carnes grasosas, los alimentos muy dulces, como chocolates, refrescos embotellados y mermeladas, los preparados de harina refinada como pasteles y bizcochos, Debe aumentar en cambio el consumo de alimentos ricos en vitaminas, minerales y fibras vegetales, tales como las frutas y las verduras, tomar bastante agua sola e ingerir proporciones adecuadas de alimentos proteínicos, como gelatina, por ejemplo.

           Es indispensable también evitar el consumo de “alimentos chatarra”. Los médicos, especialmente los de las instituciones públicas como el IMSS y el ISSSTE, reportan un aumento continuo de gastritis en niños y adolescentes, --padecimiento antes ausente en estas edades—atribuibles al consumo de esos alimentos. Los mismos presentan graves desventajas, además del costo exageradamente alto: baja capacidad nutrimental, exceso de irritantes gástricos, abuso de harinas, sal y grasas, y propiciar el consumo a cualquier hora, lo que desorganiza la emisión de jugos. Todo reunido está ubicando la gastritis como un nuevo padecimiento juvenil, antes reservado sólo a los adultos de vida muy agitada. Hay que hacer notar que las secuelas de la misma pueden ser severas.


            Para mejorar los hábitos alimenticios es importante la asistencia de todos los adolescentes a la consulta con el nutriólogo, ya que cada muchacho tiene necesidades diferentes, por lo que se requiere que las prescripciones nutriológicas se hagan de manera individualizada, pues se encuentran casos de obesidad por dieta mal balanceada, hasta anemia, por insuficiencia de nutrientes. A la necesidad, cada vez mejor clarificada, de conocer y practicar una nutrición sana, se debe la difusión que ha tenido en los últimos años la ciencia de la nutriología, así como el aumento en la costumbre del público a consultar al nutriólogo como método eficiente de prevenir enfermedades. (Robles, 2007).


jueves, 26 de septiembre de 2013

La Nutrición en los jóvenes adolescentes

            En los hábitos biológicos, como ocurre en los emocionales y cognitivos, se parte de comportamientos primitivos. En lo alimentario y lo sexual, por ejemplo, los impulsos primarios son vigorosos y poco diferenciados. Lo importante pareciera ser la satisfacción de las necesidades de cualquier manera.

            En la horda y en el clan parece ser que esto era dominante. Los avances de la civilización fueron ligando lo sexual de manera cada vez más sólida con el cariño y la solidaridad. En cuanto al hecho de comer parte de las tendencias elementales de llenarse con lo que sea, y a tomarlo de manera burda. Pero al adquirir conocimientos y desarrollar lo que podemos denominar la inteligencia alimenticia, el ser humano se va haciendo selectivo. Descubre al principio alimentos que le agradan más que otros, y posteriormente, en una etapa superior de desarrollo científico, aprende que algunos nutren más que otros. Estas actividades selectivas se perfeccionan durante toda la vida, y en algunos casos llegan al refinamiento del gourmet o a los desarrollos científicos del nutriólogo.


            Para el mejor manejo de su propia alimentación es necesario que el adolescente adquiera la noción de “dieta balanceada”. Ello le evitará el cometer graves errores que pueden llevarle a la obesidad, a la desnutrición, o a enfermedades, según sea el caso. (Robles, 2007).


miércoles, 25 de septiembre de 2013

Salud corporal en los adolescentes: alimentación, ejercicio, sueño y atención profesional

            Es muy importante favorecer el desarrollo biológico del adolescente, es indispensable cuidar su salud, y para lograrlo es necesaria la educación. La medicina preventiva ha cobrado cada vez más importancia dentro de las preocupaciones médicas, y el comienzo de toda prevención o profilaxis lo constituye la información.


            La salud biológica depende de cuatro aspectos fundamentales: la nutrición, el ejercicio, el sueño y los cuidados médicos. Para tener un adecuado manejo se requiere el apoyo de conocimientos tanto de parte de los propios adolescentes como de los padres y los maestros y constituye por lo mismo un cambio necesario de la orientación, la cual necesitan contribuir el propio orientado y el médico. (Robles, 2007).


martes, 24 de septiembre de 2013

El tiempo en la psicoterapia para jóvenes

            Robles (2007) menciona que un ingrediente indispensable de la psicoterapia es el tiempo. Aunque en algunos casos se dan resultados visibles inmediatos, debidos a correcciones rápidas de cogniciones equivocadas, en otros se requiere de prolongar búsquedas para localizar cuáles son las verdaderas congruencias entre emociones actuales y experiencias pasadas. Cuando se localizan estas congruencias las estructuras neurales previamente configuradas, van siendo sustituidas por otras nuevas de manera progresiva, proceso que requiere esfuerzo y prácticas reiteradas. Es sabido que el residuo de los comportamientos previos, estará presente de alguna manera en los comportamientos nuevos, aunque éstos representen mejores equilibrios.


            Es indispensable recordar que el adolescente mejorará su vida emocional, escolar y familiar no tanto en relación con las sesiones de terapia que se le dediquen, sino en función de las modificaciones que se hagan en su entorno, hacia el logro de un ambiente sano.