En la adolescencia temprana como en
la adolescencia propiamente tal, a diferencia de la fase preadolescente, se
caracterizan por una vida emocional mucho más rica, hay una orientación
dirigida a crecer, buscan autodefinirse en respuesta a la pregunta: “¿Quién soy
Yo?” El problema de las relaciones con las demás personas que no sean los
padres de la infancia temprana pasa a primer plano, como tema central.
Lo que diferencia este periodo de la preadolescencia es, por lo tanto, el cambio en la cantidad de los impulsos con la aparición de una nueva cualidad de impulsos. Es muy notorio el abandono de la posición regresiva preadolescente.
Lo que diferencia este periodo de la preadolescencia es, por lo tanto, el cambio en la cantidad de los impulsos con la aparición de una nueva cualidad de impulsos. Es muy notorio el abandono de la posición regresiva preadolescente.
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