La inmadurez del aparato sexual
infantil no le deja al niño alternativa, sino que lo fuerza a traducir los
hechos genitales adultos en pregenitales.
Esto explica la razón de que las relaciones
sexuales entre los padres se interpreten como escenas brutales de violencia y
conduce a todas las dificultades que resultan de la identificación con la
supuesta víctima o el supuesto agresor, que se revelan posteriormente en la
incertidumbre con respecto a su propia identidad sexual.
Ello explica también, como lo
sabemos desde hace mucho tiempo, el fracaso relativo y la desilusión de los
padres con respecto a la información sexual de los hijos. En lugar de aceptar
los hechos sexuales de la manera más razonable con que se les explica, el niño
no puede evitar traducirlos en términos que concuerdan con su experiencia, es
decir, convertirlos en las llamadas “teorías sexuales infantiles” de
inseminación a través de la boca (como en los cuentos), el nacimiento a través
del ano (teoría cloacal), la castración de la mujer durante las relaciones
sexuales, etc. (Freud, A. 1971).
Es decir, debido a que el niño no ha
completado su desarrollo emocional inicial, va a interpretar la realidad de
acuerdo al momento que está viviendo, y lo va a ver en términos pregenitales;
es decir, en función de las etapas libidinales oral, anal, fálica. Pero no lo
ve desde el punto de vista genital como los adultos lo ven.
Estamos a sus órdenes para cualquier consulta al Conmutador 55-24-30-51, Email a: info@terapiainfantilyjuvenil.mx
Estamos a sus órdenes para cualquier consulta al Conmutador 55-24-30-51, Email a: info@terapiainfantilyjuvenil.mx
No hay comentarios.:
Publicar un comentario